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jueves, 11 de noviembre de 2010

un día libre

Por fin después de ya-perdí-la-cuenta de cuántas semanas sin postear, heme aquí frente al teclado (iba a escribir "frente a mis teclas" pero podria malinterpretarse y no queremos eso) tratando de hacer de éste un post decente.

La vida me ha cambiado, otra vez. Se han agregado ingredientes nuevos que la hacen más sabrosa, a pesar del pinchiclimademierda del que estamos gozando en Schoon België (y si no se escribe así me vale madres), y a pesar de que en el último par de meses perdí también a alguien a quién yo apreciaba mucho por razones que siguen sin estar lo suficientemente claras para mí.

Les ha pasado que de repente abren la bocota y la cagan sin querer-queriendo? Pues así me pasó a mí y aunque ha sido un asunto que sigue dándome vueltas en la cabezota antes de dormir, yo sigo pensando que no actué de mala fe y que por apegarme a los pocos principios con los que rijo mi vida he tenido que sufrir las consecuencias de contar con una amiga menos. C'est la vie. No podemos coincidir en todo con todo el mundo.

Sin embargo, tampoco he tenido tiempo de deprimirme ni de llorar por los rincones ya que -a Dios gracias- tengo un trabajo -que sigo sin necesitar- un perro que me alegra el corazón, un marido que me alegra la vista y el alma, una prima Salmón que me alegra los días y amigas que me alegran las cenas y las salidas al parque. Así que no me puedo quejar (más que del pinchiclimademierda).

A veces, la vida también te pone en el camino a gente que con una palabra, una actitud o un comentario, te ayudan más de lo que ellos mismos esperan, sin pedir nada a cambio, sin esperar que les devuelvas el favor y a veces sin enterarse del todo, que tan sólo con estar ahí te hacen el día. Dicen que las cosas pasan por algo, que todo sucede en el momento justo y que lo te pasa es lo mejor que te pudo haber pasado. Yo estoy completamente convencida de que así es, y estoy aún más agradecida por todo lo que me está pasando.

Hoy, es un día libre para los belgas. Están celebrando un año más del Armisticio por lo que hoy nadie trabaja y hasta hubo desfile por lo que yo tampoco trabajé, aunque esto no significa que me la pasé sin hacer nada. Eso será hasta mañana!! jijijiji. Así que aproveché para compartirles un poco de lo que está aconteciendo en la vida de La D por estos días.

Gracias a los que leen y comentan y gracias a los que sólo leen (ya comenten, no?).

Groetjes uit België!!!








jueves, 28 de enero de 2010

remedio contra la depresión invernal (casi)

Estimado lector:

de lo que viene siendo un blog y La D se declaran oficialmente víctimas de la Depresión Invernal.

Disculpe las molestias que esto le ocasiona.

Éste iba a ser el post del martes, cuando reconocí lo que me estaba pasando, pero mi apatía era tanta y tan grande que ni ganas siquiera de encender la computadora. Es increíble lo que la falta de luz solar le puede hacer al cuerpo, al estado de ánimo y a nuestras relaciones interpersonales. Mr D y Mi Sis fueron punching-bags durante casi una semana. Primero le eché la culpa a la gripa, pero después la hueva no se iba y sólo quería comer pasta y cosas dulces. Luego, empecé a gruñirle a mi pobre domador de cualquier cosa... y entonces le eché la culpa a las hormonas, aunque los tiempos no coincidían.

Raro, no? No! es perfectamente común sufrir este padecimiento cuando se vive en países como éste y muchos otros del norte de Europa (i need holidays).

Pero bueno, hoy ya me siento ligeramente más animada. Ayer sin querer, chateé con Miss E. Y digo sin querer porque es rarísimo que coincidamos en horarios. Le dije que me sentía depre y en lugar de tratar de darme ánimos y consejos, me contó un chisme.

Fue como despertar de chingadazo y sin sueño, y encima de buen humor. Gracias, Miss E!!! Eres más efectiva que cualquier lámpara de veintemil lux y crepas con nutella (juntas!).





jueves, 7 de mayo de 2009

porqué chingaos los vecinos no se eligen?

En los comentarios de este post, le inventé una vida a mi vecino. Hoy le quiero inventar otra pero digamos en una dimensión alterna, o me conformaría con que se mudara de edificio. Les cuento con detalles.

Es joven, tal vez 30, tal vez menos. Rubio, de complexión media y ojos claros. Mr D cree que es alemán, pero yo siempre lo escucho hablando inglés y se apellida Colgan. Le apodamos "the suit" porque siempre anda de traje y corbata. Vive solo y suponemos que trabaja aquí cerca aunque no sabemos dónde ni cuál sea su profesión. En realidad sabemos su nombre porque así dice en el buzón y en uno de los timbres del interfón. Pocas veces nos lo topamos y del hola-adiós no pasa.

Los primeros meses que viví aquí no tenía queja alguna porque él nunca estaba o al menos nunca hacía ruido. De hecho sólo los domingos nos percatábamos de su presencia porque escuchábamos la aspiradora y el movedero de muebles.

Sin embargo, de unos seis meses para acá no sé qué chingados se trae, si cambió su chamba de oficina por la de escort, stripper o masajista en casa, porque no hay día que no tenga visitas, y puede ser a cualquier hora. Los viernes y sábados en la noche a huevo tiene gente, y escuchamos las risas, los cantos, los pasos, el rechinar de sillas contra el piso (o cama, quién sabe), el chaquido de las copas al brindar y voces que a veces hablan francés, a veces inglés, a veces sepa-su-chingada-madre. Y bueno, es fin de semana, blablablabla. Ok. Pero resulta que eso se repite el martes en la noche, o el miércoles a media tarde (como ayer que no me dejó echarme mi siesta el cabrón) o como hoy que no son ni las 4 pm y ya despidió a una mujer que no paraba de taconear y de reírse como hiena. Ash.

Por eso digo que es prostituto, o masajista o acompañante o no sé. Lava su ropa a medianoche, y puede hacer de su vida un papalote si no fuera porque el centrifugado me despierta a la una de la mañana y me cuesta volver a conciliar el sueño. Lo odio, lo quiero asesinar, mandarlo a chihuahua a un baile o regalarle un viaje al triángulo de las bermudas. Argh!

Si tan $olo pudiera mudarme de ca$a.

lunes, 30 de marzo de 2009

ya sé qué tengo!!!

El viernes en la noche fuimos a cenar con nuestros adorables vecinos. Bueno, la verdad, es que fuimos a compartir lo poco que nos quedaba en la alacena porque por ser final del mes tanto ellos como nosotros andábamos bien brujas. Nos las ingeniamos con una lata de sopa de tomate y una tortilla española que le salió buenísima a Mr F pero que yo sólo probé porque se me quitó rápido el hambre.

El caso es que entre la plática les dije que ya llevaba por lo menos un par de semanas con mucho sueño y cansancio, como si deveras me la pasara en chinga todos los días. Manú dijo algo en francés que no entendí y luego Mr D dijo: Lente moeheid! Manú continuó diciendo que esto sólo les pasa a los flamencos en este periódo porque él en su natal Bretaña jamás escuchó hablar de algo así... al menos, no en primavera.

Les etsplico: La lente moeheid o Cansancio Primaveral -como yo lo traducí- es un Seasonal Affective Disorder que afecta a mucha gente no nadamás en Bélgica (por ahí leí que algunos en Suiza y en Alemania también se quejaban) y que básicamente, es un tipo de depresión, donde en casos graves, puede mandar al afectado al hospital. La causa, según algunos especialistas es la falta de Serotonina (neurotransmisor que regula entre muchas otras cosas el estado de ánimo y el comportamiento) ocasionada por la escasez de luz solar.

Obvio, esto en México es imposible de pensar! Ahora ya me queda claro que mi cuerpo se ha ido adaptando al cambio de latitud y de clima. Lo segundo aunque me choca, ya trataba de ponerlo en segundo plano porque al final no puedo hacer nada contra él. Si hace frío, me pongo doble suéter y si llueve, cargo con el impermeable. Ya no ando por la vida refunfuñando mi suerte. Gracias a Dios, Mr D es belga y no finlandés o noruego!!! (si no qué chinga me habría puesto). Whatever, necesito comer más frutita aunque esté cara e insípida, y luz solar. Un mes más y podré disfrutar del mar, del sol y de la playa.

Paciencia.