miércoles, 3 de febrero de 2010

de lo que es un honor (aunque tiemble de miedo)

Estas han sido semanas raras. Necesito ajustarme de nuevo al ritmo de escritura que solía tener. No me siento a gusto teniendo pausas tan largas en el blog, y espero tener la voluntad necesaria para organizarme y que todo vuelva a fluir como antes.

Ahora hay algo que ha estado dando vueltas dentro de mi cabeza.

Tengo miedo.

Hubo una etapa de mi vida en la que no escuchaba a nadie y especialmente, si ese nadie era Mi SS Abuela o Mi madre Chula. Hice cosas de las que no estoy nada orgullosa. Algunos dirán que es normal, que es parte de la vida el aprender a chingadazos y de hecho, yo opino así. Nunca me he arrepentido de nada de lo que he hecho y me niego a empezar ahora.

Pero ellas tenían razón y la vida cambia. La vida te cambia. Con los años nos volvemos más conscientes de nuestros actos, de los pasados y de los que están por venir; más responsables, más reservados y cautelosos. Algunos dicen que a eso se le llama "madurar". Dejar de comportarse como un adolescente que no mide las consecuencias de sus actos, para empezar a ser un adulto "de bien".

Resulta que mi hermano, ese que acaba de ser papá y quien apenas si rebasa los veinte años. Ese a quien yo cargué cuando él apenas era un bebé. Ese quien al enterarme de su existencia me hizo sentir la niña más desdichada de la tierra pero quien al verle la carita por primera vez me hizo sentir que yo era la más afortunada del mundo.

Ese quien siempre me ha llenado de cariño y de respeto, que siempre se alegra al verme y me ha demostrado siempre confianza. Ese que siempre ha estado ahí para darme un abrazo y decirme que él siempre ha estado orgulloso de mí.


Miedo a fallar.


Ay, Dios! Ese escuincle que a pesar de todo me ha hecho sentir siempre como la mejor de las hermanas, me ha pedido que sea Madrina de Bautizo de su primogénito. Y yo lloro de ternura, de gratitud y de miedo. Ternura porque aún no conozco a mi sobrino, y a pesar de la distancia física que estará siempre entre nosotros, me eligieron a mí para tener este honor. Gratitud, porque con esto me acaban de hacer oficialmente "adulta"; porque mi vida a sus ojos ya no es caótica y errática y qué más grande prueba de confianza que ésta?

Y por último viene el miedo. Miedo a no ser lo suficientemente buena. Miedo a no llenar las expectativas, a estar por debajo de los estándares requeridos. Miedo, a que todas mis fallas pasadas vuelvan a mí a través de este niño mío, que no es mío pero será como si lo fuese. Y que algún día él haga caso omiso a mis palabras como yo lo hice con Mi SS Abuela y Mi Madre Chula.

Siento que no lo merezco y sin embargo, haré todo lo que esté en mis manos para no decepcionar a mi hermano que me confía a su hijo de esta manera tan tierna. Creo que es la mayor responsabilidad a la que he tenido que enfrentarme en 32 años, y es sin duda la que más temor me ha despertado.


4 comentarios:

Anónimo dijo...

La principal labor de los padrinos y madrinas es echar a perder a su apadrinado/amadrinado. Si los papás te prohiben comer dulces, por ejemplo, pues ahí llega la madrina y te da helados y cosas así, más rudas o inocentes según el nivel de maldad que uno quiera inculcar a la pequeña persona.

Enhorabuena y mucha suerte.

La Negra dijo...

Pues yo iba a ser la madrina de bautizo de la nena de mi hermana, tambien muy joven para ser mamá, pero ahora la vida la ha hecho madurar a madrazos, ni modo, yo la apoyo y la quiero y me alegra que sea feliz. ya no fui la madrina por que la hermana de mi cuñado se puso bien perra y para evitar problemas familiares, pues los padrinos fueron unos amigos de mi cuñado. El chiste es que el lazo que compartes con tu hermano y el que tienes con su bebé no se rompe y nunca sabes lo mucho que puedes influenciar (para bien) a una persona. Que padre que te dieron el honor, pero no tengas miedo, ahora eres una persona más sabia y como tienes la experiencia del desmadre, igual y sabes que decirle a tu ahijado para alejarlo del mal, jajaja. Asi que como dice, echale ganas, como le digo a mi hermana, de todas maneras voy a ser la tia cool que vive en europa y eso tiene mucha influencia, je. la mejor de las suertes!!! besos nerviosos desde inglaterra

Típico Hombre de Mal Morir dijo...

No tengas miedo, al contrario, el orgullo debe estar en ti porque te escogieron para dicho honor, si tienes miedo iremediablemente vas a fallar, mata a sangre fría todo miedo y ocupate en ser la mejor, y si no llegas a ser la mejor por lo menos serás una de la mejores, no pienses menos que esto, aparte, tu capacidad e inteligencia me imagino que han de ser superiores a lo normal, tu te conoces y tu misma te tienes que capacitar para lo nuevo que viene en tu vida. Seguridad y autoestima ante todo, toda una mujer integra y defina estampa. un beso y llena de amor a tu sobrino!

Maria torres dijo...

no engas miedo D, yo que soy mama entiendo a tu hermano y confiar un hijo a alguién es todo un honor!!! eso habla de lo mucho que te ama tu hermano seguro que serás muy buena madrina! felicidades!!!!!! y no se te olvide echarnos el bolo!!!!